Descubrí estas interesantes galaxias ojeando el atlas y viendo que tenían un nombre propio: Taffy… Instantáneamente captó mi atención y me encontré con un sistema de galaxias verdaderamente llamativo.
También conocidas como UGC 12914 y UGC 12915, las galaxias Taffy son dos galaxias situadas en la constelación de Pegaso a casi 200 millones de años luz. Allí, alejadas de grandes agrupaciones galácticas, estas dos espirales están interaccionando entre sí en un baile de proporciones cósmicas. Su último acercamiento fue hace 20 millones de años, y como consecuencia, un puente de gas se interpone entre ellas, como si no quisieran separarse del todo (algo que no va a ocurrir, puesto que ambas galaxias están abocadas a coalescer y formar una gran galaxia elíptica). El conjunto emite una gran cantidad de ondas de radio, aunque la mitad de este tipo de radiación se distribuye en el puente de hidrógeno que separa las dos galaxias. En este puente reside una importante región HII que brilla intensamente en rayos X, fruto de la acción de jóvenes y masivas estrellas que estimulan el gas circundante. En UGC 12914 se ha encontrado un anillo de estrellas que destaca junto al núcleo, formado a raíz de un impacto a gran velocidad, lo cual no hace nada más que confirmar el encuentro entre las dos galaxias. UGC 12915 es una importante fuente de radiación infrarroja, señal inequívoca de un brusco brote estelar propiciado por la interacción.
Que la denominación de estas galaxias no nos impida disfrutarlas ya que, a pesar de pertenecer al catálogo UGC, su brillo es relativamente alto. UGC 12914, la más brillante de las dos, tiene una magnitud de 13.2, mientras UGC 12915 es de magnitud 13.9, ambas al alcance modestos telescopios bajo un cielo oscuro. Tienen un tamaño de unos dos minutos de arco, de manera que son visibles incluso a bajo aumento. Con el Dobson de 40 cm no tuve ningún problema para distinguir su recortada silueta contra el negro del cielo. Usé elevados aumentos, forzando el telescopio hasta unos considerables 562 aumentos, para distinguir algunos detalles más. UGC 12914, algo más pequeña, aparecía como una franja luminosa de brillo uniforme. Sin embargo, en UGC 12915 era fácil apreciar su núcleo brillante y puntiforme. Hacia el sur podía adivinar ota región algo más brillante, y en dicho extremo se curvaba ligeramente hacia su compañera, recordándome a la pareja formada por NGC 4485 y NGC 4490 en Canes Venatici. Las galaxias Taffy son, sin duda, un espectáculo que merecería ser visitado más a menudo.
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