El cometa Catalina ha pasado hace poco de los cielos meridionales a los del hemisferio norte, con lo cual comienza ahora una etapa en la que se irá viendo cada vez mejor posicionado y aumentará de brillo ligeramente. Tuvo su máximo acercamiento al sol hace un mes, pero lo veremos cada vez más brillante porque se va acercando rápidamente hacia la Tierra. El 16 de Enero será el día que más cerca se encuentre, pudiendo alcanzar una magnitud de 5 según algunas estimaciones. Ahora mismo, situado a 1.17 unidades astronómicas de nuestro planeta, brilla con una magnitud en torno a 6, que lo hace observable con cualquier instrumento e incluso a simple vista desde cielos oscuros y limpios.
Las fotografías más actuales, como la anterior de Michael Jager, muestran dos colas bien definidas, con una tercera más pequeña y disimulada. ¿Cómo puede tener un cometa varias colas? Para entenderlo claramente podemos imaginarnos al cometa en tres dimensiones, en su camino hacia el sol a más de 150.000 km/h. Igual que si cogemos una pelota hecha de tierra y la movemos rápidamente gran parte de la arena cae hacia atrás, de la misma manera el polvo y las partículas del cometa, ante la gran velocidad a la discurre, son arrancadas y quedan rezagadas, formando la que se conoce como cola de polvo. Esta cola, como es de suponer, se va formando siguiendo la dirección de la trayectoria del cometa, como la estela de vapor de agua que deja un avión en el cielo. Sin embargo, al mismo tiempo, el cometa está atravesando la heliosfera, la capa que rodea nuestro sistema solar y cuyo protagonista es el viento estelar, cargado de partículas ionizantes. Este viento también atiza al cometa, produciendo en él una segunda cola, denominada cola iónica. Cuando el cometa se acerca al sol ambas colas están solapadas, ya que presentan la misma dirección. Sin embargo, la cosa cambia cuando el cometa da la vuelta al sol y comienza a alejarse. La cola de polvo, entonces, sigue estando en la parte posterior al cometa, fiel reflejo de su trayectoria reciente, de forma que apunta al sol. Sin embargo, la cola iónica se forma, siempre, en la dirección opuesta al sol, ya que son los vientos formados por éste los causantes de su formación. Así tenemos dos colas bien diferenciadas a partir de este momento, que irán cambiando su longitud y su ángulo según la posición relativa del cometa respecto al sol. En la siguiente imagen la cola iónica viene representada por la línea azul que, como podemos comprobar, siempre es opuesta al sol. La cola de polvo, sin embargo, se va moviendo según la inercia del cometa, siguiendo sus movimientos.
Llevaba tiempo esperando para poder cazar a este interesante cometa, pero las inclemencias meteorológicas no han dado tregua alguna, hasta ayer (cediéndole el cielo a la luna…). Decidí entonces intentar verlo con el telescopio, pese a la presencia de finas y débiles nubes altas que apenas se notaban a simple vista. Ayudado de un mapa, encontré el cometa sin grandes dificultades, apreciándolo claramente con los prismáticos como una mancha redondeada, pequeña y difusa, sin poder ver más detalles (no tenía un trípode en ese momento con el que afianzar la observación). Al telescopio ya empiezan a sonar palabras mayores. A 44 aumentos, con el ocular de gran campo, se apreciaba el núcleo intenso, de aspecto estelar en su región más central, rodeado de un halo circular, del que salía, a primera vista, una cola de unos 4 ó 5 minutos de arco de longitud. Con visión periférica se podía apreciar, formando un ángulo de unos 60º, la cola iónica, mucho más débil pero perceptible como una porción barrada del cielo algo más brillante que el fondo oscuro. Con la vista descansada era más fácil distinguirlo, y probablemente la ausencia de humedad en la atmósfera habría ayudado bastante más. A 65 aumentos logré aumentar un poco el contraste de la cola de polvo, quedando más definida y un poco abierta hacia la izquierda (de hecho podría ser la tercera cola, pequeña, que se aprecia en la fotografía, aunque necesitaría un mejor cielo para poder confirmarlo). La cola iónica se veía un poco más claramente, si bien esperaba poder verla más definida. De todas formas esta noche probaré a verla desde mejores cielos y sin nubes, y será interesante seguir su evolución durante las siguientes semanas.